Still Life with nine objects is an original black and white etching realized by Giorgio Morandi in 1954. First state, Edition of 77 (77/100). Not signed, as issued. Includes gilded frame. It is considered one of the most iconic works by Morandi. The artwork was engraved for the Associazione Amatori d'Arte, Rome. Reference: Catalogue Raisonné "The graphic work of Giorgio Morandi" by L. Vitali, No. 115. Born in Bologna in 1890, Giorgio Morandi is one of the most representative figures of 20th Century Italian art. Morandi’s vocation for engraving was not something that surfaced when he reached artistic maturity. It progressed in parallel with his painting. The engraver grew alongside the painter, as shown by the fact that his first plates, now lost together with many of his paintings from that period, go back to the year 1911, when Morandi was just 21 years old. “…For Morandi, an etching was not just a picture on a metal plate, half way between a hastily jotted note and a brilliant aside, and with all the appearance of having been improvised. For him, etchings were things that could not have been produced any other way, things that you thought about deeply, sought after and pondered. Adventure Didn't come into it, nor did hoping for the best, with the help of chance and the unpredictable effects of acid […] Morandi’s engravings stem from a profound meditation on his subjects, maturing in his mind long before he started etching.” (Lamberto Vitali,L’opera grafica di Giorgio Morandi (Giorgio Morandi’s graphic works, Einaudi, Turin 1957).
Naturaleza muerta con nueve objetos es un grabado original en blanco y negro realizado por Giorgio Morandi en 1954. Primer estado, Edición de 77 (77/100). No está firmado, como se emitió. Incluye marco dorado. Se considera una de las obras más emblemáticas de Morandi. La obra fue grabada para la Associazione Amatori d'Arte, Roma. Referencia: Catálogo razonado "La obra gráfica de Giorgio Morandi" de L. Vitali, nº 115. Nacido en Bolonia en 1890, Giorgio Morandi es una de las figuras más representativas del arte italiano del siglo XX. La vocación de Morandi por el grabado no fue algo que aflorara cuando alcanzó la madurez artística. Se desarrolló en paralelo a su pintura. El grabador creció a la par que el pintor, como demuestra el hecho de que sus primeras planchas, hoy perdidas junto a muchos de sus cuadros de la época, se remontan al año 1911, cuando Morandi tenía sólo 21 años. "...Para Morandi, un aguafuerte no era sólo un dibujo en una plancha de metal, a medio camino entre una nota anotada con prisa y un brillante aparte, y con toda la apariencia de haber sido improvisado. Para él, los grabados eran cosas que no podían producirse de otra manera, cosas en las que se pensaba profundamente, se buscaba y se reflexionaba. La aventura no entraba en juego, ni la esperanza de lo mejor, con la ayuda del azar y de los efectos imprevisibles del ácido [...] Los grabados de Morandi provienen de una profunda meditación sobre sus temas, madurada en su mente mucho antes de empezar a grabar" (Lamberto Vitali,L'opera grafica di Giorgio Morandi (La obra gráfica de Giorgio Morandi, Einaudi, Turín 1957).
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